Romper el Espejo - La Casa de los Horrores

Romper el Espejo - La Casa de los Horrores

(5.00)(6 valoraciones)

Realiza una valoración del cuento

Decididos a liberar a las almas atrapadas, Morgana y Lúcio unieron sus fuerzas. Con un grito de determinación, Morgana conjuró un hechizo mientras Lúcio, con su fuerza sobrenatural, golpeó el espejo con su puño. El cristal estalló en mil pedazos, y una oleada de energía oscura se desató en la habitación.

Las almas atrapadas comenzaron a emerger, flotando en el aire como luces brillantes. Sin embargo, no estaban agradecidas. En lugar de liberarse, se lanzaron hacia los dos, gritando en agonía. Morgana y Lúcio se dieron cuenta de que habían liberado a los espíritus, pero también habían desatado su ira.

"¡Debemos hacer algo!" gritó Lúcio, mientras las almas se abalanzaban sobre ellos. Morgana, en un intento desesperado, comenzó a recitar un hechizo de protección. Pero las almas eran demasiado poderosas, y su magia parecía ineficaz.

En medio del caos, Morgana tuvo una revelación. "¡Debemos darles lo que quieren!" exclamó. "Quizás solo buscan ser escuchadas, ser comprendidas." Lúcio asintió, y juntos comenzaron a hablar con las almas, escuchando sus historias de dolor y sufrimiento.

Con cada palabra, las almas comenzaron a calmarse, y su energía oscura se transformó en luz. Finalmente, una a una, se desvanecieron, agradecidas por haber sido escuchadas. Morgana y Lúcio se miraron, sintiendo una profunda conexión entre ellos y con las almas liberadas.

Sin embargo, la casa comenzó a temblar, y una voz profunda resonó en la habitación. "Has liberado a las almas, pero has despertado mi ira. Ahora, deberás enfrentarme." Un ser oscuro emergió de las sombras, un guardián de la casa que no permitiría que se fueran tan fácilmente.

"¡Prepárate!" gritó Lúcio, mientras se preparaban para la batalla. Sabían que tendrían que luchar no solo por sus vidas, sino también por la paz de las almas que habían liberado.

¿Qué camino eliges?