Convenciendo a la bruja

Intentaron convencer a la bruja de que eran dignos del tesoro. Bucanero habló de su valentía, Pata de Palo de su ingenio, y el Príncipe Pirata de su nobleza. La bruja escuchó atentamente y, después de un momento de reflexión, sonrió. "Me gusta su espíritu aventurero. Les daré una oportunidad. Si pueden resolver mi acertijo, el tesoro será suyo."

La bruja les planteó un acertijo complicado. Si lo resolvían, tendrían acceso al tesoro. Si no, tendrían que abandonar la isla sin nada. Los amigos se miraron, sabiendo que debían trabajar juntos para encontrar la respuesta.