Puente del Destino

En un mundo donde el tiempo y la realidad se entrelazan, el Puente del Destino se alza como un símbolo de decisiones y consecuencias. Este puente, hecho de cristal y sombras, conecta diferentes dimensiones y épocas, y es conocido por aquellos que buscan respuestas a sus preguntas más profundas.

El Alquimista del tiempo, conocido como Ezra, es un hombre de mediana edad con una larga barba plateada y ojos que reflejan el paso de los siglos. Su sabiduría es vasta, pero su corazón está cargado de un profundo anhelo por redimir un error del pasado. A su lado, el Ser del crepúsculo, llamado Lirael, es una figura etérea, con piel que brilla como el oro y ojos que cambian de color con cada emoción. Ella es la guardiana de los secretos del crepúsculo, capaz de manipular la luz y la oscuridad a su antojo. Por último, el Explorador del abismo, Thorne, es un aventurero audaz, con cicatrices que cuentan historias de sus viajes a lo largo de los reinos más oscuros. Su curiosidad es insaciable, pero su falta de precaución a menudo lo lleva a situaciones peligrosas.

Una noche, mientras la luna llena iluminaba el puente, los tres personajes se encontraron en un cruce de caminos. Ezra había estado buscando una forma de revertir el tiempo para salvar a su amada, Lirael deseaba descubrir el verdadero propósito de su existencia, y Thorne buscaba un artefacto legendario que se decía estaba escondido en el abismo del puente.

Al unirse, se dieron cuenta de que sus destinos estaban entrelazados. Sin embargo, el puente no permitiría que cruzaran juntos sin enfrentar sus propios miedos y deseos. Al llegar al centro del puente, una voz resonó en el aire, desafiándolos a tomar decisiones que cambiarían sus vidas para siempre.